El momento en el que a
los pequeños de la casa comienzan a salirles los dientes es uno de los más
duros para los padres ya que no hay nada más frustrante que verles pasarlo mal
y no poder hacer apenas nada para ayudarles y hacerles pasar ese mal
trago.
Pero, por eso mismo, hoy os vamos
a dejar unos pequeños trucos que os puedan ayudar a vosotros pero, sobre todo,
a ellos para que palien el dolor.
•
Darles cosas frías en ese momento disminuye
el dolor y la inflamación de las encías.
Y eso les ayudará a relajarse. Agua fría, leche o alimentos fresquitos serán el
mejor aliado.
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Si usáis mordedores durante esta etapa, si
los metéis en la nevera durante un tiempo para que estén fresquitos siempre les
será más agradable a los pequeños cuando los muerdan porque eso reducirá
considerablemente el dolor de la zona y la inflamación.
Como veis son pequeños
trucos donde la clave es el frío que siempre hace de calmante.
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