La Pericoronaritis

Se conoce como pericoronaritis a la inflamación de la encía que se encuentra acompañada generalmente, por la erupción de un molar.

En las personas adultas suele ocurrir cuando comienza a salir la muela del juicio y, en los niños es normal que ocurra cuando comienza a erupcionar el primer molar.

Podríamos señalar que es una situación bastante dolorosa y que suele producirse mientras la pieza dental erupciona y está tapada parcialmente por el tejido periodontal (encía)

Síntomas de la pericoronaritis

-Inflamación: La encía que cubre la muela estará inflamada y roja

-Infección: Cuando la muela se encuentra erupcionando romple el tejido periodontal y ello facilita que las bacterias de la boca tengan acceso a la encía y se multipliquen, no siempre tiene porque existir una infección.

-Dolor: en el caso de las muelas del juicio comienza en la rama de la mandíbula que se encuentra junto a la articulación temporomandibular. Este dolor que puede ir de leve a intenso.

-Absceso: Tiene lugar en los casos más avanzados y puede extender a las zonas más próximas de la mucosa oral.

Estado febril: La infección también puede producir fiebre y malestar general.

Tratamiento

Lo primero que hay que hacer es visitar al odontólogo para que vea en qué estado se encuentra la misma. Este valorará la necesitas o no la prescripción

de antibióticos y antiinflamatorios para poder eliminar la infección y, al mismo tiempo, reducir tanto el dolor como la inflamación. A su vez aportara consejos y recomendaciones sobre cómo proceder a la limpieza oral de la zona para eliminar bacterias y evitar que estas ocupen la zona y agraven el problema.

Es el odontólogo quien  valorará si se precisa retirar el tejido periodontal que cubre la muela o no, en su caso realizaría una pequeña cirugía.

En el caso de los cordales o muelas del juicio si el molar no tuviera espacio para erupcionar de forma correcta procederiamos a su extracción, para evitar el riesgo de reactivar la infección.

En el caso de los cordales o muelas del juicio si el molar no tuviera espacio para erupcionar de forma correcta procederiamos a su extracción, para evitar el riesgo de reactivar la infección.